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Abdomen agudo

“No hay circunstancias en donde deba hacerse un diagnóstico instantáneo de la causa de un abdomen agudo.

Es una conducta simple, pero insegura.”

Julian Britton, en Oxford Textbook of Surgery

Introducción

Las personas que acuden a consulta por dolor abdominal agudo e intenso plantean al médico el reto de elaborar como punto de partida una hipótesis diagnóstica apropiada, y el proceso no es sencillo; se requiere de toda la atención a los detalles de la anamnesis, de la exploración física y de juicio crítico en el análisis de la información que se recoge. Los auxiliares de diagnóstico son un recurso valioso para la toma de decisiones, pero no siempre se cuenta con los medios para su investigación. Aquí el manejo y la evolución de cada paciente dependen de las competencias clínicas del médico que elabora el diagnóstico y lo atiende. Es bien conocido que el diagnóstico presunto se modifica en una elevada proporción cuando se hace la comparación con el diagnóstico definitivo de egreso.

Definición

El abdomen agudo se define como un conjunto de signos y síntomas de diversa etiología cuyo punto principal es un intenso dolor que dura varias horas o días, y que obliga al paciente a buscar ayuda médica.

El diagnóstico y tratamiento oportunos son fundamentales en el abdomen agudo, ya que el retraso afecta de manera directa en la evolución y el pronóstico del mismo.

La mayoría de las veces el abdomen agudo requiere una intervención quirúrgica para resolver la patología que lo desencadena; sin embargo, el diagnóstico de abdomen agudo no es igual a abdomen quirúrgico.

Anatomía y fisiología

La pared abdominal está recubierta en su interior por la hoja parietal de la serosa peritoneal, en tanto que la hoja visceral envuelve, recubre y fija los órganos contenidos en la cavidad, exceptuando a los órganos urinarios y a los grandes vasos que están alojados por detrás del peritoneo y por ello se les dice extraperitoneales.

El peritoneo es una membrana semipermeable cuya superficie (1.7 m2) es comparable a la extensión de la piel. El líquido que lubrica a la serosa peritoneal por lo general no excede de 50 ml, y es un trasudado con peso específico menor de 1 016, y de contenido proteínico menor de 3 g/dl, con menos de 3 000 leucocitos/µl. Se le atribuye una acción antimicrobiana mediada por complemento y no forma coágulos por fibrinógeno. El líquido peritoneal circula hacia los ganglios linfáticos subdiafragmáticos a través de estomas en el mesotelio diafragmático y a vasos linfáticos que drenan al conducto del quilo del lado derecho. Estas condiciones normales se modifican en la inflamación y en diversos estados patológicos.1

La serosa conforma entre sus dos hojas una cavidad virtual cerrada por todas partes, ...

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