++
Las enfermedades parasitarias son un problema mundial y su magnitud no se reconoce bien. A lo largo de la historia humana las muertes que se deben a estas enfermedades fueron más numerosas que las secundarias a todas las guerras juntas. El número de personas con parasitosis en el mundo excede 5 000 millones y produce un impacto económico muy relevante, en especial en países en desarrollo, que por desgracia son los más afectados.
++
Aun cuando estas parasitosis se relacionan con climas cálidos, pueden presentarse en climas templados e incluso fríos, lo que las hace aún más diseminadas de lo que se piensa.
++
A las parasitosis las provocan organismos diversos: desde unicelulares hasta pluricelulares, desde microscópicos hasta gusanos observables a simple vista. A continuación se revisan algunos de los parásitos que afectan con mayor frecuencia al ser humano: los protozoarios, los microorganismos unicelulares, y los helmintos, que son pluricelulares y se dividen en nematodos (gusanos redondos) y platelmintos o gusanos planos, que a su vez pueden ser cestodos o trematodos (cuadro 52-1).
++
+++
Enfermedades causadas por protozoarios
++
La amebosis es una infección parasitaria que produce Entamoeba histolytica, un protozoario que afecta sobre todo el intestino grueso y el hígado. Aunque la amebosis ocurre en todo el mundo, es más frecuente en áreas subtropicales y tropicales, bajo condiciones de hacinamiento, sanidad y nutrición deficientes. E. histolytica se presenta en dos formas: quiste y trofozoíto. El ser humano y quizá algunos primates son los únicos huéspedes naturales de E. histolytica. Por lo general, la infección amebiana se adquiere por propagación fecal-bucal al ingerir los quistes, que son resistentes al pH ácido del estómago. Sin embargo, existen otras formas inusuales de transmisión, que incluyen las prácticas sexuales oral y anal, y por la contaminación de los aparatos para enemas. Una vez que los quistes llegan al intestino delgado se dividen en trofozoítos y colonizan el intestino grueso. Los trofozoítos pueden enquistarse más adelante, diseminarse por medio de las evacuaciones, para permanecer viables en el ambiente por semanas o meses, o invadir los tejidos y migrar. Los trofozoítos pueden salir junto con las evacuaciones, pero no sobreviven fuera del huésped. Por lo tanto, la forma infectante son los ...