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Las urgencias psiquiátricas son cambios agudos de la conducta que tienen repercusiones negativas sobre la capacidad del paciente para funcionar en su ambiente. A menudo esos enfermos se encuentran en un estado de crisis en el cual sus mecanismos de afrontamiento basales han quedado abrumados por circunstancias reales o percibidas. Al atender esas urgencias, el médico de urgencias encara muchos desafíos y debe priorizar sus esfuerzos clínicos hacia cuatro aspectos principales.
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En primer lugar, el médico debe asegurar su propia seguridad y el bienestar del paciente si hay violencia o conducta agitada. En segundo lugar, el médico debe realizar una evaluación de detección eficaz con búsqueda de causas orgánicas y realización de un chequeo de seguridad psiquiátrica. La evaluación de detección asegura que no hay una causa médica subyacente para la afección del enfermo, sea que induzca inicialmente la conducta aberrante o evolucione como una consecuencia de esa conducta (p. ej., malnutrición o deshidratación). La evaluación de detección también comprende un chequeo de seguridad psiquiátrica para explorar ideación suicida, ideación homicida o la incapacidad del paciente para cuidar de sí mismo. En tercer lugar, el médico debe asegurar que el individuo reciba apoyo psicológico y tratamiento médico apropiados, incluso si es necesario proporcionar el tratamiento sin el consentimiento del paciente. Por último, el médico debe determinar las indicaciones médicas apropiadas para el paciente.
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El algoritmo que se presenta en la figura 49-1 proporciona una guía para la toma de decisiones para el manejo de urgencias psiquiátricas. Este algoritmo refleja las cuatro prioridades principales para el cuidado del paciente y proporciona un marco para este capítulo.
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MÉTODO S.A.F.E.S.T. PARA PACIENTES VIOLENTOS O AGITADOS
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El médico de urgencias puede encontrar sujetos que amenazan al personal o muestran conducta violenta hacia el mismo. En estos casos, es importante reconocer los signos de advertencia tempranos de violencia inminente y adoptar un método para el manejo que reduzca la probabilidad de lesión para el personal y el enfermo. Los signos de aviso tempranos de violencia inminente incluyen declaraciones amenazantes, puños apretados, vocalizaciones fuertes, cambio de posición del cuerpo hacia una postura de pelea, movimientos agitados y golpear objetos inanimados. Si se detecta esa conducta, es necesario adoptar el método S.A.F.E.S.T.:
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Espaciamiento (spacing). Manténgase a una distancia prudente del individuo. Permita que tanto el paciente como usted tengan igual acceso a la puerta. No toque a una persona violenta.
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Aspecto (appearance). Mantenga desprendimiento profesional empático. Use a una persona de contacto primario para establecer compenetración. Tenga ...