Localmente, fomentos con sulfato de cobre al 1 por 1 000 y pomada de yodoclorohidroxiquinoleína (clioquinol [Vioformo®]) a 1 a 3%; se puede usar mupirocina o fusidato de sodio (ácido fusídico). Por vía sistémica se usan antibióticos o sulfamidas; los de primera línea son dicloxacilina, 250 a 500 mg por vía oral cada 6 horas durante 5 a 7 días; amoxicilina con ácido clavulánico 250 a 500 mg cada 6 horas, o cefalexina, 1 a 2 g/día (25 a 60 mg/kg). Los de segunda línea son azitromicina, 500 mg/día durante tres días, o clindamicina, 15 mg/kg/día divididos cada 8 horas. También se usa penicilina G procaínica, 800 000 U/día durante 10 días; se continúa con penicilina benzatínica, 1 200 000 U cada ocho días durante 1 a 2 meses. Asimismo, puede utilizarse eritromicina o tetraciclina, ambas 1 a 2 g/día, o trimetoprim-sulfametoxazol, 400 mg/80 mg. Todos estos fármacos se administran durante 10 días.