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El melanoma subungueal es un tumor melanocítico maligno que compromete cualquier zona del aparato ungueal. En la mayoría de los casos, la lesión ocurre en la matriz; rara vez tiene su origen en el lecho ungueal o el repliegue lateral. En relación con la subclasificación histológica, el melanoma ungueal pertenece al grupo del melanoma acral lentiginoso.
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La mayor parte de los melanomas tempranos del aparato ungueal es pigmentada. La imagen clínica clásica corresponde al síndrome de melanoniquia estriada, una banda longitudinal de coloración marrón a negra, de proximal a distal, localizada en la lámina ungueal. En este estadio, el diagnóstico diferencial es de suma dificultad; muchos autores recomiendan de manera sistemática considerar el diagnóstico de melanoma en presencia de melanoniquia estriada.
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Los criterios clínicos para la sospecha de melanoma son los siguientes:
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Compromiso monodactílico.
Inicio en la adultez.
Heterocromía.
Melanoniquia triangular (porción proximal más ancha que la porción distal), hallazgo raro que indica un rápido crecimiento de la lesión.
Ausencia de otra causa de pigmentación ungueal (de carácter étnico, inducida por fármacos, traumática, fenómeno posinflamatorio).
Ensanchamiento de la banda a lo largo del tiempo.
Pigmentación de la piel periungueal (signo de Hutchinson).
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En estadios avanzados se observa una pigmentación completa de la lámina ungueal. Más adelante, ésta se fisura o erosiona y la pigmentación compromete grandes áreas de la piel periungueal. En estos casos, el diagnóstico es sencillo. Algunos melanomas son acrómicos (no pigmentados); en consecuencia, el diagnóstico se vuelve en extremo difícil. Se debe sospechar en presencia de un tumor seudovascular, friable y proliferativo, de erosión de la lámina ungueal, o ante anoniquia monodactílica adquirida. Se debe tomar en cuenta que, en ocasiones, la historia clínica indica una fase anterior pigmentada. Por ende, debe realizarse el análisis histopatológico sistemático de un cambio ungueal monodactílico persistente e inexplicable. Desafortunadamente, la acromía se asocia, de manera frecuente, con melanomas agresivos y avanzados, de mal pronóstico.
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Criterios dermatoscópicos
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A nivel ungueal, se prefiere la técnica de inmersión, pues la luz polarizada es insuficiente para iluminar la gruesa lámina ungueal. Se recomienda el uso de gel de inmersión (gel incoloro de ultrasonido).
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En estadios tempranos, en asociación con la presencia de melanoniquia estriada, la dermatoscopia provee información útil para el diagnóstico diferencial del melanoma. En estadios más avanzados, el examen de la piel periungueal provee información adicional.
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Los criterios en favor de un melanoma del aparato ungueal son los siguientes (ver las figuras 18-1, 18-2 y 18-3 en el centro de aprendizaje en línea):
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Fondo de coloración marrón claro a marrón oscuro.
Presencia de líneas longitudinales irregulares de color (marrón a negro), en espaciamiento y en grosor, con áreas de rotura del paralelismo, que se refleja en la aparición de líneas más bien curvadas. Asimismo, las líneas ...