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DEFINICIONES

La hemorragia uterina anormal (AUB, abnormal uterine bleeding) puede presentar diversas características y se han actualizado los términos descriptivos para estandarizar la nomenclatura (Munro, 2011). Por ejemplo, la hemorragia menstrual profusa (HMB, heavy menstrual bleeding) (antes menorragia) define la menstruación cíclica prolongada o profusa. En términos objetivos, los factores determinantes son la menstruación que dura más de siete días o excede los 80 mL de sangre expulsada. El término hemorragia intermenstrual sustituye al de metrorragia. Es frecuente que las mujeres a veces señalen ambos cuadros. El término hemorragia por privación es más informal y se refiere a la expulsión de sangre intermenstrual que acompaña a la administración de hormonas. En algunas mujeres se observa hipomenorrea, es decir, disminución del volumen del menstruo o acortamiento del periodo menstrual. En condiciones normales, las mujeres menstrúan cada 28 días ± 7 días. Se conoce como oligomenorrea a los ciclos con intervalos mayores de 35 días. La expresión metrorragia de privación denota la expulsión predecible de sangre que es consecuencia de la disminución repentina de los niveles de progesterona. Por último, la hemorragia poscoito es la inducida por el coito vaginal.

La valoración de HMB en una situación clínica conlleva limitaciones. En primer lugar, a menudo no hay una relación precisa entre la percepción de expulsión de sangre por parte de la paciente y la cuantificación objetiva (Chimbira, 1980b), y como consecuencia se han investigado métodos objetivos para valorar la pérdida hemática. Hallberg et al. (1966) describieron una técnica para extraer la hemoglobina de las toallas sanitarias femeninas con hidróxido de sodio. La hemoglobina es transformada en hematina y puede medirse con la técnica espectrofotométrica. El procedimiento anterior, a pesar de que se usa en investigaciones, en el medio clínico tiene limitaciones evidentes.

Otros instrumentos utilizados para estimar la menorrea incluyen valoración inicial de la hemoglobina y el valor hematocrito. Las concentraciones de hemoglobina <12 g/100 mL incrementan la posibilidad de identificar a mujeres con HMB. Sin embargo, el nivel normal no descarta la posibilidad de HMB, porque muchas mujeres con hemorragia de importancia clínica muestran cifras normales.

Otro método consiste en calcular el número y el tipo de toallas sanitarias o tampones utilizados durante la menstruación. Warner et al. (2004) observaron correlaciones positivas entre HMB objetiva y la expulsión de coágulos de >2.5 cm de diámetro, y el cambio de toallas con una frecuencia mayor de cada 3 h. Los intentos de estandarizar este tipo de valoración han hecho que se elabore una gráfica de valoración pictórica de sangre (PBAC, pictorial blood assessment chart) (fig. 8-1). En una hoja se pide a la mujer que registre todos los días el número de toallas sanitarias que muestran saturación mínima, moderada o completa. Se asignan las calificaciones de este modo: un punto para cada tampón o toalla con mínima cantidad de sangre; cinco puntos si la saturación es moderada, y ...

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