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Los métodos radiológicos invasivos diagnósticos y terapéuticos son procedimientos usuales que pueden realizarse bajo la guía fluoroscópica de un equipo de rayos X (sala de angiografía), ultrasonido (US), tomografía computarizada (TC) y resonancia magnética (RM). El avance más reciente y valioso de la radiología oncológica intervencionista no es técnico sino clínico. En todo el mundo, la radiología oncológica intervencionista ha tomado su lugar en las sesiones multidisciplinarias, donde integra estos procedimientos de invasión mínima y guiados por imagen al plan de tratamiento de los pacientes con tumores sólidos. Al aprender el lenguaje de la oncología, los radiólogos intervencionistas proveen cuidados oncológicos a través de sus prácticas clínicas y hospitalarias. Junto con la oncología médica, la oncología quirúrgica y la radiooncología, la radiología oncológica intervencionista se ha convertido en el cuarto pilar del tratamiento del cáncer.1,2
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Métodos invasivos diagnósticos
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Es el procedimiento de biopsia menos invasivo. Se indica para establecer diagnósticos de malignidad o benignidad, así como para obtener material para cultivo u otros estudios de laboratorio. Las contraindicaciones pueden ser absolutas en casos de coagulopatía grave incorregible y en pacientes no cooperadores, o relativas en casos de coagulopatías, biopsia de un objetivo clínico inseguro y frente a la ausencia de una vía segura desde la piel hasta el objetivo donde se pretende tomar la muestra para biopsia. Un factor importante en la técnica de la biopsia por aspiración con aguja fina (BAAF) es la preparación de las muestras y la cooperación entre el radiólogo y el patólogo para incrementar la exactitud diagnóstica. En el Instituto Nacional de Cancerología (INCan), este tipo de muestras se realiza sobre todo en lesiones quísticas, biopsias de nódulos tiroideos y adenopatías axilares o de cuello. La biopsia con sistemas coaxiles con aguja de corte (tru-cut) tiene la ventaja de poder obtener una mayor cantidad de tejido para estudios de inmunohistoquímica y moleculares, que hoy en día son fundamentales para el diagnóstico más específico y para decidir los tratamientos dirigidos de las terapias oncológicas; por esas razones, es el método más utilizado en el servicio de los autores.
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Cada vez se utiliza más la técnica de biopsia guiada por imagen en lugar de la técnica de biopsia guiada por palpación o la técnica a ciegas.2,3 Entre los métodos de imagen utilizados está el ultrasonido, que es la modalidad preferida para una biopsia en muchas instituciones médicas, en especial en lesiones móviles y en aquéllas en las que se requieren múltiples ángulos de imagen. La tomografía computarizada se utiliza cuando los pacientes no son candidatos para el ultrasonido (p. ej., pacientes posoperados con cicatrices), en lesiones más profundas en las que el gas intestinal puede ser un obstáculo y en casos en que es necesario el contraste intravenoso para visualizar la lesión en cuestión y las estructuras vasculares circundantes. La fluoroscopia ya no se ...