++
La interpretación de imágenes de diagnóstico es claramente competencia del radiólogo o del médico a cargo del cuidado del paciente. Comprender la anatomía normal, las variantes anatómicas comunes, los cambios en la esperanza de vida y reconocer características anatomopatológicas obvias mediante el diagnóstico por imagen, pueden ampliar la comprensión del practicante no médico sobre el estado general del paciente y, de esta manera, mejorar el razonamiento clínico y el curso general de la atención. Además, comprender la relación entre la historia, el examen clínico y los resultados de las imágenes es esencial para que los diversos clínicos interactúen con el paciente durante el curso de su atención.
++
Por otra parte, los proveedores no médicos también pueden tener un papel importante en la educación del paciente, al guiarlos en la comprensión de las patologías, de los hallazgos en las imágenes, del lenguaje y taxonomía de los informes radiológicos. Esto resulta particularmente relevante en el ambiente de la práctica actual, donde los pacientes a menudo poseen o llevan consigo sus propios registros digitales y tienen fácil acceso a las imágenes y reportes radiológicos. Los cambios de la esperanza de vida, las variantes anatómicas y los hallazgos no patológicos a menudo confunden a los pacientes y afectan potencialmente sus propios conceptos internos sobre la condición que presentan. El impacto puede ser negativo y probablemente afectar los resultados de la atención o complicar el manejo óptimo del paciente. Al ayudarlo a comprender lo que muestran las imágenes y su relevancia, el practicante de salud puede desempeñar una función vital en la atención al paciente.
++
El primer paso en la observación de las imágenes es establecer su correcta orientación. Como la mayoría de las imágenes clínicas se encuentran ahora en formato digital, su orientación es automática y el visor debe reconocer esa orientación. En algunas circunstancias, aún se utilizan placas de radiografías (copia dura), por lo que aún puede necesitarse el proceso de observar una imagen a través de una caja de visualización. Por convenio, la película se coloca en una caja de visualización como si el paciente estuviera en posición anatómica (de frente al lector). Esto le permite al lector tener una orientación relativamente constante, proporcionando una presentación esperada y mejorando la capacidad de percibir cualquier alteración obvia de lo normal. Sombras, ampliaciones y distorsiones de la imagen, así como superposición de estructuras se ven en las posiciones esperadas y el observador puede entonces concentrarse en buscar lo anormal.
++
Los radiógrafos han acordado aplicar marcadores anatómicos L (left, izquierdo) o R (right, derecho) sobre la película o la imagen digital para indicar si corresponde a una extremidad o lado derecho o izquierdo del cuerpo. Un error común de novatos consiste en orientar la imagen en copia dura para ser capaces de leer las marcas R/L, en lugar de colocar la imagen en posición anatómica, ya que ...