++
La teofilina, la teobromina y la cafeína son metilxantinas.
++
La teofilina fue ampliamente utilizada una vez para el tratamiento del asma y enfermedad pulmonar obstructiva crónica, y continúa siendo empleada para la apnea del prematuro. La cafeína es la droga psicoactiva de mayor uso en el mundo, y se consume, principalmente, a través de bebidas como café, té y bebidas energéticas; pero también está contenida en medicamentos y suplementos dietéticos. La cafeína se aplica en el tratamiento médico de la apnea del prematuro, y como un complemento analgésico.
++
La toxicidad por metilxantinas puede causar alteraciones cardiacas, neurológicas y metabólicas graves. Incluso, concentraciones terapéuticas de teofilina pueden provocar efectos secundarios significativos en algunas personas. Los pacientes geriátricos con comorbilidades son más susceptibles a la toxicidad grave durante el uso terapéutico crónico, que los más jóvenes con sobredosis agudas.
++
Los efectos secundarios cardiacos, generalmente contemplan la taquicardia sinusal, y pueden incluir arritmias auriculares y/o ventriculares. Las arritmias ventriculares son más comunes con toxicidad intensa y toxicidad crónica en los ancianos y en aquellos con disfunción cardiaca subyacente. La hipotensión también puede suceder como resultado de la estimulación de los beta 2 periféricos que inducen la vasodilatación.
++
La toxicidad neurológica ocasiona agitación, dolor de cabeza, irritabilidad, insomnio, temblores, alucinaciones y convulsiones. Las convulsiones inducidas por las metilxantinas pueden ser intensas y refractarias al tratamiento estándar.
++
Los efectos secundarios metabólicos incluyen hipocaliemia, hiperglucemia y acidosis metabólica. La rabdomiólisis ha sido reportada con sobredosis de teofilina y de cafeína. El síndrome compartimental como resultado de una etiología no precisada es raro, pero está bien descrito en la toxicidad por la teofilina. Los efectos gastrointestinales más comunes son náuseas y vómitos, los cuales a menudo son graves y responden poco a los antieméticos menos potentes.
+++
Diagnóstico diferencial
++
Los niveles de teofilina sérica terapéutica de 20 μg/mL pueden producir efectos de toxicidad. En la intoxicación aguda, la gravedad de los síntomas generalmente se correlaciona con la concentración sérica, pero en los casos de toxicidad crónica, o crónica aguda, los síntomas se relacionan menos con la concentración.
++
En casos de toxicidad crónica, o crónica aguda, los efectos secundarios graves ocurren con poca advertencia y antes de que se manifiesten los síntomas de menor grado. El abandono del hábito de fumar, la cirrosis y numerosos medicamentos como la cimetidina y la eritromicina, aumentan la vida media de la teofilina e incrementan los riesgos de toxicidad crónica. Las investigaciones recomiendan que en los casos de intoxicación por teofilina o cafeína se realicen la medición seriada de la concentración sérica de teofilina o cafeína, electrolitos séricos y un ECG (electrocardiogram) de 12 derivaciones. El diagnóstico diferencial se debe hacer con otra sobredosis por simpaticomiméticos (p. ej., anfetaminas, cocaína), así como toxicidad anticolinérgica.