Skip to Main Content

¡La nueva aplicación Access ya está disponible!

Lleve su aprendizaje al siguiente nivel con la biblioteca Access en la palma de su mano. Acceda al instante a libros, vídeos, imágenes, podcasts y funciones personalizadas, donde quiera y cuando quiera.

Descárguela ahora: iOS and Android. ¡Descubra más aquí!

INTRODUCCIÓN

Los trastornos de la absorción representan una amplia variedad de procesos con múltiples causas y diversas manifestaciones clínicas. Casi todos estos problemas clínicos se relacionan con disminución de la absorción intestinal de uno o más nutrientes de la dieta, y con frecuencia se los denomina síndrome de malabsorción (absorción deficiente). Este término no es el más correcto, ya que representa un estado fisiopatológico, pero no proporciona una explicación etiológica del problema subyacente y por tanto no debe considerarse un diagnóstico final adecuado. Las únicas situaciones clínicas en que la absorción está incrementada son la hemocromatosis y la enfermedad de Wilson, en las que aumenta la absorción de hierro y cobre, respectivamente.

La mayor parte de estos trastornos clínicos se acompaña de esteatorrea, un incremento de la excreción de grasas en las heces >7% de la ingestión de grasa en la dieta. Algunas alteraciones de la absorción no se vinculan con esteatorrea: el déficit primario de lactasa, que representa ausencia congénita de la enzima disacaridasa (lactasa) en el borde en cepillo del intestino delgado, causa tan sólo “malabsorción” de lactosa y la anemia perniciosa se acompaña de un notable descenso de la absorción intestinal de cobalamina (vitamina B12) a causa de la ausencia del factor intrínseco de las células parietales gástricas, necesario para la absorción de cobalamina.

Los trastornos de la absorción deben incluirse dentro del diagnóstico diferencial de la diarrea (cap. 42). En primer lugar, la diarrea se relaciona o es consecuencia del descenso de la absorción de uno o más nutrientes de la dieta. La diarrea puede ser secundaria al proceso intestinal causante de la esteatorrea, o a la propia esteatorrea. De este modo, la enfermedad celiaca (véase más adelante) se vincula con extensos cambios morfológicos en la mucosa del intestino delgado y una menor absorción de diversos nutrientes de la dieta; por el contrario, la diarrea de la esteatorrea es el resultado del efecto de los ácidos grasos de la dieta no absorbidos sobre el transporte de iones en el intestino, por lo regular el colon. Por ejemplo, los ácidos oleico y ricinoleico (un ácido graso hidroxilado por bacterias que es también el componente activo del aceite de ricino, un laxante de uso frecuente) inducen la secreción activa de iones Cl en el colon, de modo más probable como consecuencia del incremento del Ca intracelular. Además, la diarrea puede causar una esteatorrea leve (<11 g de excreción de grasas con una ingestión de 100 g de ésta en la dieta). En segundo lugar, la mayoría de los pacientes refiere diarrea, no malabsorción de grasas. En tercer lugar, muchos trastornos intestinales que se presentan con diarrea como síntoma predominante (p. ej., colitis ulcerosa, diarrea del viajero secundaria a la enterotoxina producida por Escherichia coli) no implican en todos los casos decremento de la absorción de algún nutrimento de la dieta.

La diarrea es un síntoma ...

Pop-up div Successfully Displayed

This div only appears when the trigger link is hovered over. Otherwise it is hidden from view.