+
Se deduce que es necesario algún proceso de adaptación o acomodación de la cabeza en partes adecuadas de los diversos planos pélvicos para asegurar la finalización del parto. Esto es provocado por cierto movimiento de la parte presente, que pertenece a lo que se denomina mecanismo de parto.
—J. Whitridge Williams (1903)
++
El parto es el proceso que conduce al nacimiento de un niño. Comienza con el inicio de las contracciones uterinas regulares y termina con el alumbramiento del recién nacido y la expulsión de la placenta. La gravidez y el nacimiento son procesos fisiológicos y, por tanto, el parto y la llegada del bebé deben considerarse normales para la mayoría de las embarazadas.
+++
Cambios en el suelo pélvico
++
Se requieren muchos cambios de adaptación para el embarazo y para el trabajo de parto y el alumbramiento. Según Nygaard (2015), el parto vaginal es un evento traumático. Para evaluar esto en parte, Staer-Jensen y colegas (2015) obtuvieron mediciones ecográficas transperineales de los músculos del suelo pélvico a las 21 y las 37 semanas de gestación, y nuevamente a las 6 semanas, y a los 6 y 12 meses después del parto. Ellos midieron en 300 nulíparas la movilidad del cuello de la vejiga y el área dentro del hiato urogenital durante la maniobra de Valsalva. Este hiato es la abertura en forma de U en los músculos del suelo pélvico a través de la cual pasan la uretra, la vagina y el recto (capítulo 2, Perineo). En este estudio, el área elevadora del hiato fue significativamente mayor a las 37 semanas de gestación y a las 6 semanas después del parto en comparación con el embarazo más temprano. Luego, a los 6 meses después del parto, el hiato mejoró y se redujo para volver a un área comparable a la de la gestación de 21 semanas. Sin embargo, no se observó ninguna mejora adicional a los 12 meses después del parto. Es de destacar que la ampliación del área hiatal sólo se observó en aquellas que tuvieron partos vaginales.
++
Estos hallazgos demuestran cambios en la estructura del suelo pélvico antes del parto que pueden reflejar las adaptaciones necesarias para el alumbramiento vaginal (Nygaard, 2015). Los cambios adicionales en el suelo pélvico se tratan en el capítulo 4 (Trompas de Falopio), y las contribuciones del embarazo y el parto para el posterior prolapso de los órganos pélvicos y la incontinencia se describen en el capítulo 30 (Riesgos del parto por cesárea).
++
Al inicio del parto, la posición del feto con respecto al canal del parto es fundamental para la vía del parto y, por tanto, debe determinarse en el parto prematuro. Las relaciones importantes incluyen estática, presentación, actitud y posición fetales.
...