El pénfigo es una enfermedad vesicante intraepidérmica poco común, que ocurre en la piel y las mucosas. Es causado por autoanticuerpos contra moléculas de adhesión que se expresan en la piel y las mucosas. Se desconoce la causa y antes de la era de los antibióticos y los esteroides, este padecimiento era letal en el transcurso de cinco años. Las ampollas aparecen de forma espontánea y son sensibles y dolorosas cuando se rompen. Se ha publicado pénfigo inducido por fármacos, entre los cuales se incluyen penicilamina, captoprilo y otros. Hay varias modalidades de pénfigo: pénfigo vulgar y su variante, pénfigo vegetante, y el pénfigo foliáceo, con vesicación más superficial y su variante, pénfigo eritematoso. Todas las presentaciones pueden ocurrir a cualquier edad, pero más a menudo en la madurez. La forma vulgar se inicia en la boca en más de 50% de los casos. La modalidad foliácea tiende a acompañar a otras enfermedades autoinmunitarias o puede ser inducida por fármacos. El pénfigo paraneoplásico, una presentación extraña del trastorno se relaciona con numerosos tipos de neoplasias benignas y malignas, pero más a menudo con linfoma no Hodgkin.