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ACTUALIZACIONES CLÍNICAS EN ENFERMEDAD POR REFLUJO GASTROESOFÁGICO
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Un gran estudio prospectivo con más de 17 000 pacientes que recibieron inhibidores de la bomba de protones por una mediana de tres años no encontró incremento en el riesgo de algunos de los efectos secundarios previamente reportados, incluidas neumonía, fracturas óseas, enfermedades renales (por nefritis intersticial), demencia o infarto miocárdico.
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En 2019, un estudio clínico con asignación al azar de pacientes con pirosis resistente y con reflujo confirmado (ácido o no ácido) pese al tratamiento con inhibidores de bomba de protones cada 12 h, la funduplicatura ocasionó alivio adecuado de los síntomas en 67% de los casos a un año en comparación con 12% a 28% con el tratamiento médico continuo.
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BASES PARA EL DIAGNÓSTICO
Pirosis; puede exacerbarse con las comidas, al inclinarse o acostarse.
Para los casos típicos sin complicaciones no se necesitan estudios diagnósticos.
La endoscopia demuestra anomalías en 33% de los pacientes.
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La enfermedad por reflujo gastroesofágico (GERD, gastroesophageal reflux disease) surge cuando el reflujo del contenido gástrico genera síntomas o complicaciones. La GERD afecta a 20% de los adultos. Los dos síntomas más comunes son pirosis y regurgitación. Sin embargo, otros síntomas de enfermedad por reflujo gastroesofágico incluyen dispepsia, disfagia, eructos, dolor torácico, tos y disfonía. Aunque la mayoría de los enfermos tiene una enfermedad leve, hasta en un tercio de ellos se daña la mucosa del esófago (esofagitis por reflujo) y en unos cuantos más hay complicaciones más importantes. Varios factores pueden contribuir a la enfermedad por reflujo gastroesofágico.
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A. Disfunción de la unión gastroesofágica
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La barrera antirreflujo en la unión gastroesofágica (eFig. 15–4) depende de la presión del LES, la localización intraabdominal del esfínter (lo que produce una “válvula de tapadera” formada por la angulación de la unión gastroesofágica) y la compresión externa de los pilares diafragmáticos sobre el esfínter. En la mayoría de los pacientes con GERD, la presión basal del LES es normal (10 a 35 mmHg). La mayor parte de los episodios antirreflujo ocurre durante las relajaciones transitorias del LES desencadenadas por la distensión gástrica secundaria a un reflejo vagovagal. Un subgrupo de pacientes con GERD tiene incompetencia del LES (< 10 mmHg), lo que causa aumento del reflujo ácido, sobre todo en posición supina o cuando la presión intraabdominal se eleva por levantar objetos o flexionarse. En 50% de los pacientes con GERD erosiva grave puede haber hipotensión del esfínter.
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Existe una hernia hiatal en 25% de los pacientes con GERD no erosiva, en 75% de los que tienen esofagitis erosiva grave y en más ...