+++
BASES PARA EL DIAGNÓSTICO
++
Antecedente de tabaquismo u otras exposiciones crónicas por inhalación.
Tos crónica, disnea y producción de esputo.
Estertores graves, disminución de la intensidad de los ruidos respiratorios y espiración prolongada en la exploración física (audio 9–4 y 9–11).
Limitación del flujo de aire, casi siempre progresiva, en pruebas de función pulmonar que no puede revertirse por completo (eFig. 9–3).
++
++
La Global Initiative for Chronic Obstructive Lung Disease (GOLD) define la enfermedad pulmonar obstructiva crónica como un estado patológico común, susceptible de prevención y de tratamiento, que se caracteriza por síntomas respiratorios persistentes y limitación al flujo de aire por anomalías alveolares y de las vías respiratorias, por lo general causadas por exposición significativa a partículas o gases nocivos. El término “enfermedad pulmonar obstructiva crónica” EPOC evolucionó desde un término genérico para la bronquitis crónica y enfisema a otro que hace referencia a un síndrome clínico de síntomas respiratorios crónicos, anomalías estructurales pulmonares (vías respiratorias o alveolos) y alteración de la función pulmonar que se origina por múltiples causas que ocasionan limitación del flujo de aire y que no se corrige por completo. Los síntomas incluyen tos, disnea y producción de esputo. La enfermedad pulmonar obstructiva crónica es la principal causa de morbilidad crónica es la tercera causa de muerte a nivel mundial.
++
La causa más importante de EPOC en Estados Unidos y Europa occidental es el tabaquismo. Casi todos los que fuman sufren una disminución acelerada de la función pulmonar que depende de la dosis y duración. Un estudio grande de fumadores activos reportó una disminución anual en la FEV1 de 63 mL por año en varones y 54 mL por año en mujeres en comparación con 30 mL por año en varones y 22 mL por año en mujeres que han dejado de fumar. Alrededor de la cuarta a quinta década de la vida, el 15% de los fumadores desarrolla síntomas que causan incapacidad progresiva. Cerca de 66% de los enfermos que se atiende por EPOC tiene una exposición importante al humo del tabaco. El restante 33% muestra una combinación de exposiciones al humo del tabaco ambiental, polvos y sustancias químicas en su lugar de trabajo y contaminación aérea de interiores por combustible en biomasa utilizado para cocinar y calefacción en edificios mal ventilados. También se ha relacionado con la contaminación atmosférica exterior, infecciones de vías respiratorias, factores familiares y alergia, ...