++
El litio se utiliza de manera amplia para tratar la depresión bipolar y otros trastornos psiquiátricos. La única vía normal de eliminación de dicho mineral es la renal, por lo que las personas con nefropatía crónica están en peligro de acumular el litio y, como consecuencia, surgen efectos tóxicos de inicio gradual (crónico). Es más frecuente la intoxicación como resultado de la sobremedicación accidental crónica o disfunción renal, y por lo regular es más intensa que la aparecida después de la sobredosis oral aguda.
+++
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
++
Los efectos tóxicos leves a moderados causan letargo, confusión, temblor, ataxia y balbuceos; todo lo anterior puede evolucionar y llegar a espasmos mioclónicos, delirio, estado de coma y convulsiones. La recuperación puede ser lenta e incompleta después de la intoxicación grave. Los datos de estudios de laboratorio en personas con intoxicación crónica suelen manifestar incremento de la creatinina sérica y también de la proporción BUN/creatinina, en virtud de la contracción volumétrica subyacente. Con frecuencia hay leucocitosis. Entre los hallazgos ECG figuran el aplanamiento y la inversión de la onda T y en ocasiones bradicardia o paro del nódulo sinusal. La diabetes insípida nefrógena puede aparecer con sobredosis o con dosis terapéuticas. También se ha descrito disfunción de las glándulas tiroides y paratiroides como resultado de la exposición prolongada al litio.
++
Las concentraciones de litio pueden ser díficiles de interpretar. El mineral tiene una proporción tóxica: terapéutica baja y puede presentarse intoxicación crónica con concentraciones apenas mayores de las terapéuticas (0.8 a 1.2 meq/L). A diferencia de ello, los individuos que han ingerido en forma aguda el mineral pueden tener valores transitorios extraordinariamente grandes (se ha señalado incluso 10 meq/L) sin síntomas, antes de que se distribuya por completo litio en los tejidos. Nota: pueden cuantificarse concentraciones altas falsas de litio (tan elevadas como 6 a 8 meq/L) si se usa el tubo con tapa verde para muestra de sangre (que contiene heparina y litio).
++
Después de ingerir una sobredosis aguda por litio deben considerarse el lavado estomacal o la irrigación integral del intestino para evitar la absorción general (Nota: el carbón vegetal activado no adsorbe al litio). En todos los enfermos se debe valorar la función renal y el estado volumétrico y administrar, según se necesiten, soluciones intravenosas salinas. Se realiza cuantificación seriada de las concentraciones séricas de litio y se solicita ayuda para su interpretación y la necesidad de diálisis, de un toxicólogo médico o de un centro regional de control de intoxicaciones (1-800-222-1222). Debe considerarse la realización de hemodiálisis si el cuadro sintomático es muy intenso o si la cifra sérica rebasa los 4 a 5 meq/L en especial si la función renal está afectada. De manera alternativa a la hemodiálisis puede ser eficaz la hemofiltración como técnica extrarrenal continua.
+
Hlaing
PM
et al. Neurotoxicity in chronic ...