+++
BASES PARA EL DIAGNÓSTICO
++
Síntomas de obstrucción o irritación durante la micción.
Probable percepción de crecimiento prostático en el estudio rectal.
Ausencia de infección urinaria, trastorno neurológico, estenosis, neoplasia maligna prostática o vesical.
++
En los varones, la hiperplasia prostática benigna es el tumor benigno más común y su incidencia se relaciona con la edad. La prevalencia de hiperplasia prostática benigna en estudios de necropsia se incrementa desde cerca de 20% entre varones de 41 a 50 años de edad, hasta 50% entre los de 51 a 60, y más de 90% entre los mayores de 80 años. Aunque la evidencia clínica de la enfermedad es menos frecuente, los síntomas de obstrucción prostática también están relacionados con la edad. A los 55 años, cerca de 25% de los varones refiere síntomas obstructivos durante la micción. A los 75 años de edad, 50% de los varones padece disminución de la fuerza y calibre del chorro de la orina.
++
Los factores de riesgo para el desarrollo de hiperplasia prostática benigna no se conocen bien. Algunos estudios sugieren una predisposición genética y en otros se han reconocido diferencias raciales. Cerca de la mitad de los varones menores de 60 años de edad que se someten a intervención quirúrgica por hiperplasia prostática benigna tiene una forma hereditaria de la enfermedad. Es más probable que esta forma sea un rasgo autosómico dominante, y los familiares en primer grado de estos pacientes tienen un riesgo relativo casi cuatro veces mayor.
++
La causa de los síntomas urinarios bajos es multifactorial. Un componente frecuente en este complejo sintomático es la hipertrofia prostática benigna. La próstata está compuesta por elementos estromales y epiteliales, y cada uno, ya sea solo o en combinación, puede dar lugar a nódulos hiperplásicos y los síntomas relacionados con la hiperplasia prostática benigna. Los regímenes de tratamiento médico pueden dirigirse a cada elemento.
++
En los estudios clínicos y de laboratorio se han identificado dos factores necesarios para el desarrollo de la hiperplasia prostática benigna: dihidrotestosterona (DHT) y envejecimiento. Al parecer, el principal mecanismo de acción son interacciones entre estroma y epitelio (las células del estroma regulan el crecimiento de las células epiteliales o de otras células del estroma por medio de señales parácrinas o autócrinas o bien secretando factores del crecimiento como factor básico de crecimiento de fibroblastos o factor beta transformador del crecimiento). Los resultados de estudios han mostrado que la hiperplasia prostática benigna se halla bajo control endocrino y que la castración conduce a la regresión de la enfermedad establecida y la mejoría de los síntomas urinarios. La administración de un análogo de la hormona liberadora de hormona luteinizante (LHRH, luteinizing hormone-releasing hormone) a varones reduce de manera reversible la hiperplasia prostática benigna, lo que deriva en mejoría objetiva en la velocidad del flujo y mejoría subjetiva en los síntomas.