Skip to Main Content

¡La nueva aplicación Access ya está disponible!

Lleve su aprendizaje al siguiente nivel con la biblioteca Access en la palma de su mano. Acceda al instante a libros, vídeos, imágenes, podcasts y funciones personalizadas, donde quiera y cuando quiera.

Descárguela ahora: iOS and Android. ¡Descubra más aquí!

INTRODUCCIÓN Y EPIDEMIOLOGÍA

Las heridas de la cara y la piel cabelluda tienen una ubicación cercana, pero diferencias importantes respecto a la reparación. Las heridas faciales son las más aparentes desde el punto de vista estético de todas las heridas y, por tanto, requieren una valoración cuidadosa y una técnica de reparación meticulosa para procurar los mejores resultados. Las heridas de la piel cabelluda son menos visibles y típicamente se cierran con menos atención a los detalles. Los médicos del servicio de urgencias pueden cerrar la mayor parte de las heridas de la cara y piel cabelluda, pero debe solicitarse valoración por especialistas si el cierre presenta aspectos técnicos complejos.

Tres principios generales guían la reparación de las heridas de cara y piel cabelluda.1 El primero es realizar limpieza e irrigación para retirar cuerpos extraños a fin de reducir la infección. El segundo es limitar el desbridamiento de los bordes cutáneos porque la excelente irrigación de la cara y piel cabelluda permite que se recuperen tejidos que al inicio parecían no viables. El tercero es que si la infiltración de anestésicos locales distorsiona la anatomía y dificulta observar el alineamiento de los bordes de la herida, se aplican bloqueos nerviosos regionales (cap. 36, Anestesia local y regional).2

Para la sutura de la cara se prefiere el uso de material monofilamentoso no absorbible. El material de sutura de absorción rápida y los pegamentos hísticos son alternativas en ubicaciones selectas para niños.3,4 En mucosa y capas faciales, se utiliza material de sutura absorbible. Para reducir la cicatrización, se coloca material de sutura percutáneo de la cara a 1 a 2 mm de los bordes de la herida con separación de 3 a 4 mm, con los bordes evertidos. Se coloca el material de sutura sobre las mucosas 2 a 3 mm de los bordes de la herida, con separación de 5 a 7 mm, colocándolos muy superficiales de forma que no se incluya músculo o aponeurosis. El uso de lupas quirúrgicas puede facilitar la colocación más precisa del material de sutura en las heridas de la cara.

En pacientes con heridas faciales se interroga sobre la posibilidad de violencia intrafamiliar y se notifica a las autoridades apropiadas si se sospecha violencia (cuadro 42-1).5-7

CUADRO 42-1Lesiones maxilofaciales y violencia intrafamiliar en las salas de urgencia

FISIOPATOLOGÍA

...

Pop-up div Successfully Displayed

This div only appears when the trigger link is hovered over. Otherwise it is hidden from view.