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Con toda certeza éste era un perro rabioso. Habían sacado a Joseph Meister de debajo de él cubierto con espuma y sangre.
Louis Pasteur; descripción del niño de nueve años a quien inmunizó exitosamente contra la rabia en julio de 1885
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El presente capítulo aborda el virus de la rabia.
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Descripción general
La rabia es una enfermedad viral aguda letal del sistema nervioso central (CNS, central nervous system) que suele provocar encefalitis. El virus de la rabia pertenece a la familia Rhabdoviridae, tiene forma de bala y posee envoltura, con una nucleocápside helicoidal con un genoma de RNA de sentido negativo. La palabra rabia se deriva del verbo latino “rabiar”, que sugiere la apariencia del paciente rabioso. Puede afectar a todos los mamíferos y se transmite entre ellos a través de secreciones infectadas, la mayoría de las veces por mordedura. Se reconoció por primera vez hace más de 3000 años, y ha sido la más temida de las enfermedades infecciosas. Se dice que Aristóteles distinguió que un perro rabioso podía transmitir la rabia. La rabia implica la aparición de síntomas y signos neurológicos graves en un paciente que fue mordido por un animal (un perro rabioso o animales salvajes); el periodo de incubación es de 10 días a 1 año. El virus se replica en el sitio de la mordedura seguido de la entrada en el sistema nervioso periférico en las uniones neuromusculares y se propaga al CNS, donde se replica exclusivamente dentro de la materia gris y luego se propaga de manera centrífuga al sistema nervioso autónomo. Las manifestaciones neurológicas son muy características, con un exceso progresivo y constante de actividad motora, agitación, alucinaciones y salivación. El paciente parece tener espuma en la boca y contracciones graves de la garganta si intenta tragar. La afectación del centro respiratorio produce parálisis respiratoria, la principal causa de muerte. La recuperación es poco frecuente. La profilaxis y el tratamiento posteriores a la exposición incluyen limpieza de la herida con agua y jabón, instilación de globulina hiperinmune en y alrededor de la herida y administración IM para neutralizar el virus, y vacunación antirrábica inactivada los días 0, 3, 7 y 14. La globulina hiperinmune y la vacuna deben administrarse en dos sitios diferentes.
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El virus de la rabia es un rabdovirus con envoltura y con forma de bala, helicoidal, que mide 70 nm de diámetro por 180 nm de largo, perteneciente al género Lyssavirus y a la familia Rhabdovirus (figura 17–1). La nucleocápside (N) helicoidal está formada por un genoma RNA negativo de una sola cadena y una polimerasa RNA dependiente de RNA contenidos en una proteína matriz (M) cubierta por una bicapa de lípidos que presenta muñones de glucoproteína (G). Las excrecencias de los muñones de glucoproteína, que provocan anticuerpos neutralizantes e inhibidores de la hemaglutinación, cubren la superficie ...