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Muchas afecciones cutáneas que afectan a los brazos son consecuencia de su exposición directa a la luz solar, el contacto con alérgenos o irritantes, traumatismos, picaduras de insectos y otras agresiones ambientales. Los brazos están al alcance de la mano contralateral, por lo que los pacientes pueden rascarse fácilmente las dermatosis pruriginosas. El rascado o el traumatismo pueden producir una raya lineal de pápulas (fenómeno de Koebner) en ciertas enfermedades como la psoriasis y el liquen plano. Algunas enfermedades cutáneas tienen predilección por localizaciones específicas en los brazos. Aunque se desconoce por qué muchas dermatosis tienden a localizarse en determinadas localizaciones anatómicas, la distribución de las lesiones suele ser una pista muy importante para establecer el diagnóstico.
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Las enfermedades cutáneas que afectan a los brazos pueden clasificarse a grandes rasgos en las siguientes categorías, empezando por las enfermedades más comunes (cuadro 37–1).
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Dermatosis inflamatorias
Enfermedades infecciosas
Infestaciones y picaduras de insectos
Enfermedades inmunoampollosas
Enfermedades autoinmunitarias
Neoplasias
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