RT Book, Section A1 Lane, H. Clifford A1 Fauci, Anthony S. A2 Jameson, J. Larry A2 Fauci, Anthony S. A2 Kasper, Dennis L. A2 Hauser, Stephen L. A2 Longo, Dan L. A2 Loscalzo, Joseph SR Print(0) ID 1162413621 T1 Bioterrorismo microbiano T2 Harrison. Principios de Medicina Interna, 20e YR 2018 FD 2018 PB McGraw-Hill Education PP New York, NY SN 9781456263102 LK accessmedicina.mhmedical.com/content.aspx?aid=1162413621 RD 2024/04/23 AB Las descripciones del empleo de patógenos microbianos como posibles armas de guerra o terrorismo datan de épocas antiguas. Entre las más citadas se encuentran episodios como el de los Hitatas enviando carneros infectados con Tularemia a sus enemigos en el siglo XIV a. C., la contaminación del suministro de agua 600 años a.C. con el hongo Claviceps purpurea (el cornezuelo del centeno) por parte de los asirios, el lanzamiento de cadáveres de víctimas de la peste en los muros de la ciudad de Kaffa por los soldados tártaros en 1346 y la propagación de la viruela a la población estadounidense nativa leal a Francia mediante sábanas contaminadas por los ingleses en 1763. En Estados Unidos, los trágicos atentados del World Trade Center y el Pentágono el 11 de Septiembre de 2001 antecedieron al envío de cartas que contenían esporas de carbunco a oficinas de medios de comunicación y del Congreso a través del servicio postal de ese país, lo cual cambió totalmente los criterios del público estadounidense en cuanto a la vulnerabilidad a ataques bioterroristas microbianos, y la gravedad y los esfuerzos del gobierno federal para proteger a sus ciudadanos de agresiones futuras. La ciencia moderna ha elaborado métodos para la propagación deliberada o el agravamiento de enfermedades en formas que desconocían nuestros antepasados. La combinación de investigación de ciencias básicas, práctica médica adecuada y vigilancia constante es un factor necesario de defensa contra tales ataques.