RT Book, Section A1 Ángel Saavedra, Miguel A2 Barile Fabris, Leonor A. A2 Rull Gabayet, Marina SR Print(0) ID 1177490274 T1 Tratamiento del síndrome antifosfolípido T2 Terapéutica en Reumatología YR 2020 FD 2020 PB McGraw-Hill Education PP New York, NY SN 9786073024433 LK accessmedicina.mhmedical.com/content.aspx?aid=1177490274 RD 2024/04/23 AB El síndrome antifosfolípido es una enfermedad autoinmune asociada con la presencia de autoanticuerpos, principalmente anticuerpos anticardiolipina, anticuerpos anti-bβ2-glicoproteína 1 y anticoagulante lúpico. La epidemiología exacta del síndrome se desconoce, pero se ha calculado que la incidencia de la enfermedad es de 5 casos por cada 100 mil individuos por año y la prevalencia de 40 a 50 casos por cada 100 mil individuos. El síndrome antifosfolípido se puede presentar de forma primaria o asociarse a otras condiciones, principalmente a lupus eritematoso sistémico. Típicamente, el síndrome antifosfolípido se caracteriza por la presencia de complicaciones vasculares (trombosis arteriales, venosas o de vasos pequeños), complicaciones obstétricas (abortos recurrentes, muerte fetal tardía, pre-eclampsia o restricción del crecimiento intrauterino) o una combinación de ambas. Sin embargo, el espectro clínico de la enfermedad se ha expandido y otras manifestaciones, tales como trombocitopenia, lesiones cardiacas valvulares, livedo reticularis o nefropatía también se pueden encontrar en porcentajes variables. El síndrome antifosfolípido catastrófico es una presentación rara de la enfermedad (1%) que incluye la afección simultánea de por lo menos tres órganos, sistemas o tejidos en un periodo corto de tiempo (1 semana) con la confirmación histológica del involucro de vasos pequeños. El diagnóstico del síndrome se realiza en presencia de las manifestaciones clínicas mencionadas y la detección de los anticuerpos antifosfolípidos circulantes. Los anticuerpos que son clínicamente relevantes en el diagnóstico de la enfermedad incluyen anticuerpos anticardiolipina, anticuerpos anti-β2-glicoproteína 1 y anticoagulante lúpico. Existen criterios de clasificación de la enfermedad, pero estos se utilizan con fines de investigación.