RT Book, Section A1 Iwasa, Janet A1 Marshall, Wallace SR Print(0) ID 1177263064 T1 Señalización celular y transducción de señales: comunicación intercelular T2 Biología celular y molecular. Conceptos y experimentos, 8e YR 2020 FD 2020 PB McGraw-Hill Education PP New York, NY SN 9781456269227 LK accessmedicina.mhmedical.com/content.aspx?aid=1177263064 RD 2024/11/02 AB Cazando en aguas costeras poco profundas del océano pacífico, el calamar hawaiano utiliza una táctica inteligente para evitar que las presas se asusten. A medida que flotan sobre el fondo del océano en las noches iluminadas por la luz de la luna, el calamar produce un brillo para que su silueta se oscurezca cuando se ve desde abajo. La luz producida por el calamar es una forma de bioluminiscencia, donde la luz es producida y emitida por un organismo vivo. El brillo asombroso del calamar hawaiano en realidad es producido por una bacteria que viven en simbiosis, Aliivibrio fischeri, que es capturada y conservada en un órgano altamente especializado, ubicado en el manto del calamar. A. fischeri sólo produce fluorescencia en condiciones de hacinamiento, como en el órgano luminoso del calamar. Cuando las bacterias se dispersan dejan de producirlos. La fluorescencia de A. fischeri es un ejemplo de comportamiento conocido como detección de hacinamiento, en el que los organismos unicelulares se comunican entre sí por medio de mensajes químicos. Durante varios años, después de que este fenómeno se descubriera por primera vez, se creía que la detección de hacinamiento ocurriría sólo en casos aislados y poco frecuentes. Sin embargo, en los últimos años numerosos estudios han demostrado que casi todas las bacterias parecen producir y liberar moléculas de señalización para coordinar diversas actividades dentro de la misma especie y entre diferentes especies bacterianas. La secreción de factores de virulencia, la formación y mantenimiento de biopelículas, la fluorescencia e incluso la muerte celular programada son comportamientos que pueden activarse mediante una lista cada vez mayor de moléculas de señalización bacteriana. Los mecanismos por los cuales ocurre la señalización varían ampliamente entre las diferentes especies. Por ejemplo, las bacterias grampositivas secretan moléculas de señalización, por lo general péptidos cortos y modificados. Cuando se encuentran en altas concentraciones, estos péptidos pueden unirse a receptores afines en la superficie celular de otras bacterias, activando una vía de señalización que conduce a la transcripción de genes y la producción de proteínas que modifican el comportamiento de la bacteria. Por el contrario, las bacterias gramnegativas sintetizan y liberan moléculas de señalización en forma de moléculas pequeñas. Estas moléculas pueden difundirse libremente a través de la membrana y unirse a factores de transcripción citoplásmicos. A. fischeri es una bacteria gramnegativa que produce una molécula pequeña denominada AHL (N-acil homoserina lactona) que se libera el medio ambiente. A densidades celulares suficientemente elevadas, AHL se une a un factor de transcripción, lo que finalmente conduce a la producción de genes de luminiscencia y a la generación de luz.