RT Book, Section A1 Goldson, Edward A1 Reynolds, Ann A2 Hay, William W. A2 Levin, Myron J. A2 Sondheimer, Judith M. A2 Deterding, Robin R. SR Print(0) ID 1120608047 T1 Desarrollo y conducta infantiles T2 Diagnóstico y tratamiento pediátricos, 19e YR 2010 FD 2010 PB McGraw-Hill Education PP New York, NY SN 9786071502780 LK accessmedicina.mhmedical.com/content.aspx?aid=1120608047 RD 2024/03/29 AB El campo del desarrollo y la conducta pediátricos surgió como una subespecialidad que atiende no sólo el desarrollo típico, sino también el diagnóstico y la valoración de la conducta y el desarrollo atípicos. Este capítulo presenta las generalidades del desarrollo típico, identifica sus variaciones y estudia diversas discapacidades del desarrollo. En primer lugar, revisa el desarrollo normal, pero no abarca el periodo neonatal o la adolescencia (véanse capítulos 1 y 3, respectivamente). En segundo lugar, atiende las variaciones conductuales y destaca las que reflejan el espectro de un desarrollo normal y no una afección. En tercer lugar, considera trastornos del desarrollo y la conducta y su tratamiento. El principio del desarrollo, es decir, el concepto de cambio y maduración constantes, es parte integral de la práctica diaria de la pediatría. Por ejemplo, se reconoce que un lactante de tres meses de edad es muy diferente de un niño de tres años, así como de un adolescente de 13, no sólo en relación con lo que el niño puede hacer, sino también en términos de las enfermedades que puede presentar. Desde la perspectiva del pediatra de atención primaria, todas estas áreas deben considerarse en el contexto de un “hogar médico”. Un hogar médico se define como un ambiente que proporciona atención consistente y continua, competente en cuanto a la cultura, integral y sensible a los niños y sus familias. Es un ambiente que defiende los intereses de todos los niños sin importar si son típicos o si enfrentan retos o discapacidades del desarrollo. Al incorporar los principios de desarrollo infantil —el concepto de que los niños cambian en forma constante— el hogar médico es el ambiente óptimo para entender y fomentar el desarrollo típico y tratar variaciones, retrasos y desviaciones, ya que pueden ocurrir en la trayectoria vital del niño y su familia.